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Antes de comenzar el otoño se deben revisar los sistemas de climatización
Aunque con los constantes récords de temperaturas el verano se nos ha hecho largo a todos, más pronto que tarde llegará a su fin. En breve llegará el otoño con menos horas de luz natural, la bajada de temperaturas y la temporada de lluvias.
De la misma manera que nosotros nos mentalizamos y preparamos para la vuelta a la rutina tras las vacaciones estivales, nuestra casa también se tiene que adecuar a las nuevas circunstancias. Desde el jardín o la terraza a las zonas de almacenaje o el mantenimiento de algunas instalaciones. El otoño es la mejor estación para tachar esas tareas que llevan pendientes unos cuantos meses y que se han ido postergando todo el verano.
El cambio de armario es una actividad esencial cuando llega una nueva estación. Con el otoño llegan a nuestros vestidores las cazadoras de entretiempo, los pantalones largos y comienzan a aparecer los primeros jerséis. Y, cómo no, es necesario tener a mano el paraguas para que no nos sorprendan las lluvias otoñales. Al guardar la ropa y complementos puramente estivales, aprovecha para hacer limpieza: deshazte de todo aquello que esté muy desmejorado (como bañadores y bikinis, sandalias o camisetas). Si tienes mascotas, puedes reutilizar las toallas envejecidas para secar a tus peludos tras un paseo bajo la lluvia. Un problema común con el cambio de armario otoñal es la falta de espacio, ya que las prendas de invierno ocupan mucho más que las de verano. Aprovecha la ocasión y hazte con cajas de plástico que puedes dejar bajo las camas. O cajas de tela para los altillos de los armarios. Otra opción es recurrir a un buen perchero en la entrada de casa que nos permitirá tener a mano la ropa de abrigo que más vamos a usar.
Hay dos elementos que vuelven al hogar con la llegada del otoño. Unos son los edredones. Si puedes lavarlos en casa, aprovecha los últimos días con horas de luz para secarlos al aire y que no cojan olores. Si son de plumas, por ejemplo, haz una visita a la lavandería antes de que empiece el frío y así poder volver a usarlos como si estuvieran nuevos. Para un descanso otoñal inmejorable, aprovecha para darle la vuelta a los colchones de casa, un detalles que los fabricantes aconsejan y que mejora su durabilidad. Otro elemento textil que recuperamos en otoño son las alfombras, perfectas para decorar aportando calidez y estilo. Como con los edredones: antes de que se reduzcan las horas de luz solar, aprovecha y límpialas en casa. Si no tienes tiempo o espacio para realizar un lavado a fondo lo más recomendable es que la lleves a la tintorería. Allí harán una limpieza profunda de la alfombra con la técnica adecuada.
Durante esta época tenemos que aprovechar para revisar todas las instalaciones que nos calentarán durante el invierno. En apenas unas semanas comienza el invierno y tanto la calefacción como los calentadores de agua tienen que estar a punto. Antes de encender cualquier sistema de climatización después de meses parado se deben realizar comprobaciones para asegurarnos de que todo funcionará correctamente. Para ello, es aconsejable contactar con empresas de mantenimiento especializadas. Si tienes radiadores, recuerda hacerles el purgado antes de probar si funcionan. Si son eléctricos y temes por la factura de la luz, puedes adquirir programadores que los encenderán y apagarán el tiempo necesario. Si tu casa no está todo lo aislada que debería, recuerda que persianas y algunas cortinas te ayudarán a mantener el calor dentro del hogar.
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