Esta funcionalidad es sólo para registrados

María José Muñoz

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Desde hace meses, las embarazadas que dan a luz en la Maternidad del hospital Virgen de la Salud de Toledo no reciben flores de los comercios del ramo en el barrio de Palomarejos. Estos comercios, florecientes desde hace años, decidieron echar el cierre ante las malas perspectivas de negocio por el inmimente cese de actividad del centro hospitalario , con más de 50 años de historia, algo que se producirá muy pronto cuando culmine la mudanza al nuevo hospital del barrio del Polígono a finales de año.

A igual que las floristerías, en los últimos tiempos han cerrado en este barrio otro tipo de comercios del ramo de la confección o la hostelería, entre otros, y los vecinos se preguntan qué será de esta populosa barriada que creció y se desarrolló en torno al edificio del hospital Virgen de la Salud, que fue inaugurado en 1965, cuando cese su actividad . En la actualidad, el edificio presenta una fachada envejecida y pueden obervarse desde el exterior numerosas persianas deterioradas y descoloridas por el paso del tiempo, como le ocurre al firme de muchas de sus calles y al mobiliario urbano.

5.623 empadronados . Palomarejos ocupa un total de 28,22 hectáreas y cuenta con 183.642 metros cuadrados de residenciales construidos; 2.334 viviendas, 143 edificios residenciales y 5.623 personas empadronadas en el barrio, situado entre las avenidas de Barber y Europa y Portugal.

¿Existe algún plan para la reactivación de este barrio cuando cierre el hospital? El 20 de octubre de 2020, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, anunció que el barrio de Palomarejos será sometido a un «gran plan de renovación urbana» cuando el hospital Virgen de la Salud cierre sus puertas a principios de junio de 2021 (se ha retrasado unos meses). Lo dijo durante la presentación en el Palacio de Fuensalida del Plan de Traslado del Hospital Universitario de Toledo al barrio de Santa María de Benquerencia, «que durará 148 días ‘netos’ y finalizará el 4 de junio».

Page añadió que dicho plan de renovación urbana constituiría «una gran oportunidad para la ciudad de Toledo, ya que en esta zona de la ciudad se va a planificar parte sustancial del Toledo del futuro y debe tener de todo».

Ha pasado casi un año de aquellas palabras y el Ayuntamiento de Toledo tiene planes para el barrio, aunque aún poco definidos. Fuentes municipales han señalado a ABC que el traslado al hospital del Polígono y de la Comandancia de la Guardia Civil a La Peraleda «va a modificar la estructura social, económica y urbanística del barrio de Palomarejos ». Por este motivo, «venimos trabajando en la elaboración de un planeamiento de regeneración del barrio aprovechando los cambios que se van a producir al eliminarse un foco de atracción y de actividad como es el Hospital».

Desarrollo sostenible . Las mismas fuentes entienden este momento «como una oportunidad para convertir el barrio en un modelo de desarrollo urbano sostenible », en consonancia con los objetivos que nos marca la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Para llevar a cabo estos objetivos, el Ayuntamiento asegura que va a utilizar todas las herramientas que estén a su alcance, «principalmente la nueva ordenación urbana de la que pronto tendremos un avance , además de los fondos europeos».

Entre los puntos principales de este posicionamiento se encuentra un acuerdo con la Tesorería de la Seguridad Social , propietaria de la parcela sobre la que se asienta el Virgen de la Salud, para determinar las actuaciones futuras sobre este suelo . En cuanto a la Comandancia de la Guardia Civil, la intención es «mantener su uso residencial para promover viviendas para jóvenes».

Es también intención del Ayuntamiento facilitar la rehabilitación de viviendas , mejorar la eficiencia energética de los edificios y la accesibilidad y la digitalización. «Intervenciones en el entorno urbano basadas en la sostenibilidad energética, la adaptación de zonas verdes al cambio climático, movilidad sostenible (puntos de recarga, carriles bici…), digitalización (zonas wi-fi) », añaden estas fuentes sobre los objetivos del plan, que contempla también «actuaciones de fomento del empleo local para paliar la pérdida de un foco de atracción de actividad como es el Hospital y ofrecer una solución para el barrio de Corea».

En defnitiva, un planteamiento «ambicioso que no se limita a la ordenación del territorio, sino que avanza hacia una modelo de cohesión social que haga del barrio un espacio más amable y cómodo para los vecinos », añaden. Para ello, «en todo el proceso vamos fomentar la cogobernanza y la participación de los colectivos y asociaciones que actúan en Palomarejos. Queremos que la ciudadanía sea un motor de impulso de este proyecto, formando parte de las decisiones en todo el proceso».

Vecinos: «no sabemos nada» . Pues bien, estos vecinos con cuyas decisiones —dice el Ayuntamiento— va a contar en todo momento para materializar los planes que se tienen para el barrio, desconocen del todo el proyecto. Así lo asegura Paco Arce , representante de la veterana asociación de vecinos «La Voz del Barrio», nacida en 1972, y que, con independencia del «incierto» futuro de Palomarejos tras el cierre del hospital, reclaman mejoras inmediatas para el día a día del barrio.

Este lunes, 13 de septiembre, en la reunión del Consejo de Participación Ciudadana Distrito Centro , realizaron una propuesta sobre actuaciones de mantenimiento, « con nuevas inversiones que hacen falta para el barrio », y criticaron lo sucedido en anteriores consejos: «aprobar las propuestas que se presentaban y no ejecutarlas puesto que se carecía de consignación presupuestaria para las mismas, dando como resultado que los consejos quedaban convertidos en una ‘tomadura de pelo’».

Actuaciones necesarias . Paco Arce pone algunos ejemplos de necesidades perentorias para el barrio, como la reposición de arbolado y arbustos en varias calles y plazas (antes del desastre de Filomena); árboles secos que deberían quitarse tras los efectos de esta borrasca en las calles Cáceres, Segovia, Corpus Christi, Lisboa y plaza-glorieta de Holanda; repintado de bancos ; repintado de la pista deportiva de la calle Santander y su confluencia con la calle Barcelona, «que viene siendo utilizada desde hace mucho tiempo como aparcamiento libre y vigilada por el clásigo ‘gorrilla’, por lo que es conveniente averiguar si este terreno abandonado es público o privado, con el objetivo de adecentarlo»; solución a la cascada existente en la plaza Ciudad de Nara , frente al cuartel de la Policía Nacional, «que lleva muchos años en estado de abandono»; y repintado de la señalización horizontal , ya que en su día quedaron algunos pasos peatonales sin pintar en el barrio.

Por todo ello, los vecinos consideran que el mantenimiento es de «vital importancia» y debe acometerse a la menor brevedad. Pero también tienen otras muchas dudas y reclaman información a la Presidencia del Distrito sobre el hospital Virgen de la Salud , «el destino de los edificios y el tratamiento con otras administraciones», y preguntan: «¿hay alguna novedad con referencia a la Admministración central propietaria del edificio de la antigua escuela de enfermeras»?.

También quieren saber el resultado del estudio de georradar del terreno que iba destinado a cuartel de la Guardia Civil en Vega Baja , y en qué situación se encuentra la posible permuta del cuartel de la Benemérita y el terreno de La Peraleda.

Finalmente, quieren saber si está redactado el previsto proyecto de remodelación de la Avenida de Barber , vía principal del barrio.

La barriada, que se extiende entre las avenidas de la Reconquista, Barber y Europa y Portugal, cuenta con 5.789 habitantes, 704 de ellos extranjeros de 41 nacionalidades diferentes (según datos de 2018), una diversidad sociocultural que en los últimos años ha ido perdiendo empuje por el envejecimiento de la población y como consecuencia el descenso de jóvenes, que no encuentran incentivos de futuro para establecerse en la zona.

La mudanza hospitalaria puede afectar, dice Arce, a más de 250 comercios y a los de barrios aledaños como el de Santa Teresa . «La población de Palomarejos es de 5.800 vecinos, pero puede afectar a más de 31.000 personas, ya que el hospital atiende también a la Reconquista, Santa Teresa, el Poblado Obrero, San Pedro el Verde, Buenavista y San Antón. La atención hospitalaria a nivel general va a afectar a 31.000 vecinos», reitera.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Lo más leído en España

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación